Este post será algo breve, el fin de semana fue
una edición más de la posada con mis amigos, a diferencia de otros
años en ésta ocasión rentamos una casa en las afueras de la
ciudad, esto para no generar destrozos en la casa de alguno de
nosotros además para garantizar que hubiera espacio para todos, se
compraron carnitas para comer y pozole para cenar, cómo es costumbre
no se planeo todo a la perfección y nos quedamos sin desayuno al día
siguiente, nada que un recalentado no pudiera remediar, pero a fin de
cuentas fue un alimento improvisado.
Los asistentes son muchos como para mencionarlos
aquí pero digamos que fueron todos los amigos cercanos que viven en
Guadalajara.
La casa estaba muy bien, fue rentada por medio de
Airbnb y tenía bastantes cuartos, una cocina equipada y más mesas
de las que podríamos necesitar, además de agua caliente y bastantes
baños completos.
Las carnitas y el pozole estuvieron bastante
buenos, además de la botana que fue comprada en el mercado de
abastos por el buen Sainz, el pozole estuvo especialmente bueno ya
que fue hecho por la madre de Daniel.
Entre platica, botana juegos de baraja, domino y
hasta un juego de catan el cual gané con bastante fortuna y gracias
a que a los dados les dio por caer en el número 4 en bastantes
ocasiones, transcurrió la tarde, al llegar la noche hicimos el ya
tradicional intercambio de broma en el cual se hace un regalo a uno
de los amigos con alguna broma para pasar un rato agradable, si no lo
han probado lo recomiendo, es una oportunidad para no tomarse las
cosas tan en serio y reír.
Después de la cena mis energías fueron
disminuyendo por lo que poco antes de la una de la madrugada nos
fuimos a dormir mi esposa y yo, nos esperaba un largo día el
domingo.
En resumen me la pasé bastante bien en compañía
de mis seres queridos y sin pasar ni hambre ni frío por lo cual
estoy agradecido con la vida.